2 sept 2014

Aquellos adioses tardíos

Hace algún tiempo dejé de pensar en ti. Hoy eres sólo un recuerdo que sobrevive en mi mente y que se alimenta de mi deseo de ser mejor cada día. Me enseñaste aún cuando me terquedad y mi rebeldía te hicieron daño. Nunca hubo un momento para decir lo siento. En realidad, a pesar del tiempo, yo lo sigo sintiendo. 
Ese 10 de abril, cuando decidiste soltar mi mano, lo recuerdo con claridad. Era un día bastante normal en el que fuiste feliz. No es algo que me guste hablar o compartir, de hecho nunca lo hago. Creo que no tuve el valor suficiente para llorar y entender que me habías dejado sola en este mundo. Cada quien sufrió su duelo, cada quien lo superó pero hoy me doy cuenta que es algo que sigue en lo más profundo de mi corazón. Nunca dejé de sentirme sola.
A casi 10 años de tu partida, pienso que Dios me estaba dando fuerzas para enfrentarme a todo, a vivir sola en otro país y sin la familia. Tú me enseñaste el valor de las cosas, el ser humana y darlo todo por la familia. Sin embargo, esto es algo que aún me cuesta y con lo que lucho a diario. Quiero ser extraordinaria porque me enseñaste a serlo. 

Hoy sólo recordé lo doloroso que fue decirte adiós. 

19 jul 2014

Tú, padre de David

La felicidad existe. Hoy lo doy por hecho porque te he conocido. Haz cambiado mi vida en sólo seis meses y me siento feliz de tenerte conmigo, nunca imaginé que ese 26 de enero modificaría mi presente. ¡Y sí que lo hizo! Me he descubierto soñando despierta, pensando en un futuro a tu lado, en quizá tener una familia y en vivir justos por siempre. Me siento ñoña pero feliz.
Todo el tiempo quiero decirte lo mucho que siento por ti, quiero abrazarte y verte dormir. Nunca antes había experimentado tanta tranquilidad y seguridad. Antes pensaba que las relaciones sentimentales éxitosas sólo estaban destinadas para unos pocos y que es de 'felices para siempre' era la mentira más grande que nos dejó Disney. Hoy mi corazón es tuyo y no tengo miedo de lo que pueda pasar, eres mi acompañante en estos días de 2014.
Nunca te olvidaré. Aunque como dice Borgues..."Ya somos el olvido que seremos". Ya lo somos sin olvidarnos. Pero en mí, estarás presente en cada día de mi vida, en cada pensamiento y en cada sentir. No podré decirte adiós porque me enseñaste a creer, a sentir. Yo me había dado por vencida,  pensaba que Dios se había olvidado de mí, pero apareciste para quedarte y amarte por siempre. 

Atte.: Yo en mi versión más ñoña. 

5 jun 2014

Algunas divagaciones antes de los 27

A unos días de mis 27, sigo pensando qué me hace quedarme aquí. Hace ya casi 4 años que decidí decirle adiós a Cartagena para emprender un viaje que cambiaría mi vida. Sí, eso sucedió. Cada día pasa, de hecho. Hoy siento que le debo demasiado a éste lugar. 
Comprendí que el destino lo hacemos nosotros y que no es fácil, nada es fácil. Hay que ser fuertes para enfrentar lo que venga, sensibles para disfrutar lo que se presente y amar todo como Dios permita que pase. Hoy entiendo que la firmeza de espíritu la podemos lograr siempre que querramos ser excelentes. 
Hay tanto por qué agradecer. Éste lugar ha complementado mi formación. He llorado, he sufrido, he sentido y aquí sigo. Firme y con ánimos de seguir adelante. Quizá no soy lo que muchos quisieran pero al menos puedo ser feliz con lo que veo en el espejo todos los días. 
Aquí he conocido personas que nunca olvidaré, pues son de ese tipo que te marcan el corazón y la vida. Creo que me falta aprender a desprenderme, a decir adiós. Siempre hay caminos que tomar y nuevos conocidos por hacer. Sólo que aún no quiero. Seguiré el tiempo que sea necesario. Hay una meta que cumplir y muchos sueños por los que luchar. 
A cuatro días de otro nuevo cumpleaños, de otro año más de vejez, sólo puedo decir: Gracias. 


21 may 2014

Reflexiones cortas II

Luego de mucho tiempo y algunos sufrimientos, llegó el momento de decir que existe en mi historia un 'nosotros'. Nunca imaginé que el universo pudiera escucharme y lograra confabular a mi favor para poder entregarme a alguien que me amara lo suficiente como para poder volver a creer. Se siente bonito.
Es indescriptible la paz que siente mi alma, aunque mi corazón todavía esté en un proceso de sanarse. Claro, hablamos de heridas acumuladas durante más de 25 años, eso no es curable de un día para otro. Soy fiel creyente en los milagros.
Yo era un príncipe que siempre se creyó mendigo, un ser inferior que nunca iba a ser amado, a prestar de creer firmemente en el poder del amor. Hoy lo compruebo y veo poco a poco desaparecer mis fantasmas, mis demonios. Hay un 'nosotros' que me hace feliz y pensar en el futuro. 




25 feb 2014

Mi primera vez en los cielos


Los nervios se hicieron presentes y la adrenalina estaba a todo lo que da. Era momento de enfrentar todos los miedos y poder disfrutar de una de las experiencias más anheladas por los seres humanos: volar.
Esto lo pude sentir al vivir mi primer vuelo en parapente, durante el ‘Festival del Globo 2014’ en este municipio.
Con público que me animaba a no desistir de la oportunidad, entendí que quienes practican este deporte se convierten en una familia. Todos se apoyan y cuando alguien tiene una ‘mala’ caída, ahí están para ayudar “al compañero que cayó mal”.
“No tienes nada que preocuparte, es muy seguro”, decía mi instructor Salvador mientras me preparaba y aseguraba el equipo para no tener inconvenientes en el aire. “Estoy seguro que te encantará”, dijo. Yo sólo podría pensar en abrazar el cielo.
Llegó el momento se salir. Abrí mis piernas a la altura de mis hombros y corrí al vacío luego de que me dieran la instrucción. Ahí estaba. El paisaje, el aire y yo. “No existe nada que supere esto”, pensé.
Pude ver en todo su esplendor a Fortín y sus alrededores. Pude distinguir la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, el puente del Metlac, la unidad deportiva ‘Eliezer Morales’, entre otros lugares. Todo me fue tan familiar. El aire que golpeaba mi rostro, me hacía entender que era real, un momento que quizá no volverá pero que quedará presente en mi memoria.
El tiempo pasó pronto y mis 20 minutos en el aire llegaron a su fin. Alcé mis piernas para no lastimarme y volví a tocar tierra. Ahí vinieron los abrazos de quienes me recibieron como uno de ellos: los parapentistas que viven su vida al máximo y que volar los alienta a seguir.







27 ene 2014

Divagaciones de una noche cualquiera II

Ese miedo sigue presente. Me invade, me envuelve. No me deja ser. Hoy nuevamente vuelvo a intentarlo pero no dejo de pensar en ti, miedo. Mi corazón idiota me dice que aunque las rodillas duelan de tanto caer, siempre hay que seguir. Yo, mi pensamiento racional, duda. 

Llego a ese momento en que creer se vuelve utópico y el deseo de seguir adelante es nulo. Sólo necesito fuerzas. Fe. Confiar y soñar que todo es posible. Soy un espíritu libre que desea volar al horizonte, sin ataduras, ni presiones. Quiero ser yo, pero pienso en ti. Me convierto en algo pequeño y mi mundo se reduce a la nada.