30 abr 2013

Entre mis pensamientos I

No sé si sea yo, pero poco le atino a las cosas del amor. Veo con frecuencia que muchos de mis amigos viven intensos romances con personas extraordinarias, relaciones duraderas y sólidas, además de durables, aunque en mi realidad, eso no existe.
Quizá tengo un imán para atraer a la gente más complicada o con todo, menos buenas intenciones conmigo. Algunos han sido bipolares, otros obsesivos con el trabajo, sin embargo, en su mayoría han tenido el pequeño detalle de ser egoístas y ególatras. 
Estas cuestiones aunadas a cada uno de mis defectos y fantasmas han hecho una gran combinación para mantenerme sola, pues sólo son momentos fugaces con personas fugaces que no llenan completamente mis expectativas. Creo que ese es el problema. 
Debo decir que no sueño con un hombre perfecto. Sólo quiero uno que pueda amarme con locura y que acepte mi trabajo y horarios complicados, que no le sea difícil entender que creo en la libertad como modo de vida y que el amor todo lo puede. Creo que no pido mucho. Es algo sencillo pero casi imposible de encontrar.
Me haré a un lado, sin perder la esperanza de que algún día haya un 'nosotros' que pueda contar. 

21 abr 2013

Sin nada particular que decir

Quizá sí haya mucho que contar de estos últimos meses de mi vida, y no me atrevo a hacerlo porque quiero intimidad. No sé si sea un error pero he llegado al punto de fastidiarme cuando alguien me pregunta por cuestiones que considero sólo mías.
Cada vez me siento más lejana y en la búsqueda de nuevos horizontes, pues un espíritu libre como yo no puede limitarse a la absurda rutina del día a día. Ya sé. Divago en lo mismo de siempre. Estoy sola y extraño mi vida anterior. No. Sólo quiero decir que aquí sigo. Pensando, analizando y sintiendo. 
Muchos han dejado de preguntar por mí, otros me ven desde lejos y otros de plano hacen como si no me conocieran. En efecto, no me conocen. Se sorprenden al ver hasta dónde he llegado y lo que soy hoy. Quiero seguir aquí. Andando, aprendiendo, queriendo. 




Pide un milagro


María no deja de ver a la 'Patrona' a quien se le celebra en su comunidad. La mira directamente como quien busca obtener la certeza de que su superior le atiende. En su caso, va en busca de una respuesta muy personal: Quiere bendiciones para su familia.
Sabe que tiene una sola oportunidad y es la que le ha llegado. Se acerca, le sonríe y cierra sus ojos para comenzar una muda plegaria. Sólo ella y nuestra Señora del Rosario conocen los detalles de lo que está pidiendo, aunque es notoria la vehemencia de su clamor al apretar sus labios.
La oración dura unos minutos mientras el mundo transcurre a su alrededor. El padre continúa dando bendiciones a los feligreses y hay quienes ya han iniciado el convivio preparado para todos los habitantes de la comunidad de Palo Alto, misma que pertenece a este municipio. Todo pasa y María sigue ahí. Su ropa denota que es una mujer de condición humilde y que vive del campo, pero sus rasgos muestran que ha sido emprendedora.
Al finalizar toca el manto que tiene la virgen y acaricia al Santo Niño que tiene en sus brazos. Ella tiene claro que no puede irse sin reverenciar a su redentor, por eso, se arrodilla sin importarle al cantidad de pétalos que hay en el suelo, y luego se persigna. Vuelve a la realidad suspendida para darse cuenta que hay alguien viéndole. Sin embargo, no se avergüenza. Sonríe y dice suavemente: "creo que puedo tener un milagro, es muy buena la madre de Dios".
María hace parte de esta comunidad que ayer celebró a la Virgen del Rosario como patrona del lugar y de las 'batallas. Así, se llevó a cabo un festejo simbólico lleno de un ambiente familiar, en donde participaron cada uno de los habitantes de esta zona de Fortín.